Uno de los pilares más importantes para cuidar nuestro organismo es tener una buena alimentación. Para ello, dejar a un lado los excesos de grasas, azúcares, alcohol o tabaco es fundamental, pero además hay que saber qué alimentos elegir para que nuestro cuerpo esté sano por dentro y por fuera.
Muchas de las enfermedades que padecemos podrían evitarse con una correcta alimentación y nunca es tarde para cambiar nuestros malos hábitos y enseñar a nuestros nietos a comer bien desde pequeños.
Estos son los alimentos que debe haber en tu nevera para tener una salud de hierro:
- Verduras y hortalizas: reducen el colesterol y son ricas en fibra, además aportan gran variedad de vitaminas y minerales por lo que es recomendable comerlas a diario en raciones pequeñas de unos 150 gramos. Puede ser en ensalada, puré, cocinas, etc.
- Legumbres: ricas en proteínas y fibra, son excelentes para combatir las enfermedades del corazón. Según un estudio publicado en American Journal of Clinical Nutrition, el consumo frecuente de legumbres reduce en un 14% el riesgo de sufrir infarto o angina de pecho. De dos a cuatro raciones a la semana serían la cantidad perfecta para una correcta alimentación.
- Pescados: contienen omega 3 y vitaminas, además su grasa es muy beneficiosa para nuestro corazón y los pescados más ricos en esta grasa son los azules. Lo correcto sería consumirlo al menos 3 veces por semana.
- Carnes: tienen proteínas y vitaminas, sacian nuestro hambre y comerlas a la plancha con unas gotitas de aceite de oliva es un auténtico manjar. Podemos consumir todo tipo de carne: de ternera, de cerdo, de cordero, de ave… siempre retirando el exceso de grasas y en cantidades prudentes. La cantidad óptima es de 3 ó 4 filetes (pequeños) a la semana.
- Panes y cereales: proporcionan energía y nutrientes, también contienen hierro, potasio, fósforo y calcio, por lo que son un complemento perfecto a nuestra alimentación. La pasta y el arroz, el pan integral, etc. aportan a nuestra dieta una rica fuente de energía y sirven para acompañar carnes y pescados.
- Frutos secos: es bueno comer entre 100 y 150 gramos a la semana, son buenos para la memoria, aportan energía a nuestro organismo y tienen vitaminas, pero no se debe abusar de ellos, ya que tienen un aporte calórico alto.
- Fruta: contienen fibra, vitaminas, minerales, antioxidantes y un alto contenido en agua, por lo que podemos comer unas 3 piezas al día sin ningún problema. Hay a quien le sientan mejor entre horas porque les quitan el hambre a media mañana o media tarde y quienes las prefieren de postre. El efecto en nuestro organismo es igual de bueno en ambos casos.