La ONG Educo ha realizado un informe al que ha llamado ”Crisis y efecto dominó ¿Quedan piezas por caer?. El bienestar infantil, abuelas y abuelos en la brecha” del cual se extrae que el 80% de los abuelos ayudan económicamente a sus hijos y nietos, una cifra que ha aumentado 6 puntos en los últimos 5 años.

Las personas mayores estamos tirando como podemos del carro de la economía familiar y dedicamos una media de 290 euros al mes en ayudar a los nuestros, además de darles de comer varias veces por semana y de pasar unas 7 horas al día al cuidado de nuestros nietos.

No es de extrañar por lo tanto que nos cueste llegar a fin de mes, ya que haciendo números, más o menos la mitad de los pensionistas cobramos en torno a los mil euros, de los cuales se destinan entre un 20 y un 30% a ayudar a la familia. Esto implica que renunciamos a otras cosas como comer determinados alimentos, cuidar de nuestra salud, comprarnos algún capricho o seguir acudiendo a nuestro centro de mayores, y uno de cada diez ha tenido, incluso, que vender propiedades para hacerse cargo de los gastos.

La implicación de los mayores en la sociedad es enorme y lo hemos demostrado en los buenos y en los malos momentos. Ahora nos toca ser el respaldo económico de nuestras familias, pero también somos el apoyo anímico de nuestros hijos. Ellos confían en nosotros y nos siguen necesitando a pesar de los años que tengan porque si la crisis está teniendo algo bueno es que nos une.

Ya se han cumplido siete años desde que comenzaran los problemas económicos a nivel mundial y con ellos el desánimo y la falta de esperanza de muchas personas. Ahora, dicen los políticos que ya empezamos a ver la luz al final del túnel, pero si alguien ha arrimado el hombro, esos hemos sido los mayores. Esperemos que sepan valorarlo como se merece ahora que se acercan las elecciones generales y no se quede todo en falsas promesas electorales para ganar votos.

Foto: Shutterstock

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