Beber una copa de champán dos o tres veces por semana mejora la memoria y previene trastornos cerebrales como la demencia y el Alzheimer. Y no lo decimos nosotros, lo dice un estudio realizado en la Universidad Reading de Reino Unido.
Según esta investigación, las personas mayores de 40 años deberían beber de vez en cuando este maravilloso vino espumoso de origen francés ya que el efecto del ácido fenólico que se encuentra en las uvas negras utilizadas para producir el champán previene el avance de la demencia que suele empezar a mostrar sus primeros síntomas a estas edades y fortalece nuestra memoria.
Para demostrar estos efectos del champán, los científicos han experimentado con ratas que tras consumir una pequeña dosis de la bebida mezclada con su comida, eran capaces de recorrer un laberinto para buscar hasta un 70% del alimento que se les suministraba, mientras que sin champán solo conseguían encontrar la mitad. Además, tras seis semanas consumiendo de forma regular esta bebida espumosa, se comprobó que el número de proteínas necesarias para la memoria a corto plazo habían duplicado su concentración.
Una excelente noticia para los que nos gustan las celebraciones con brindis incluido y esta vez con más motivo si refuerza nuestra memoria.
