¡Es tiempo de cerezas! Y parece que esta exquisita fruta de verano no sólo es rica en sabor y en color, sino que además es un complemento ideal para nuestro organismo.
Especialistas en nutrición afirman que el consumo de cerezas (o picotas) puede prevenir algunas enfermedades y que además de ser un complemento alimenticio extraordinario, también sirven como remedio para algunas dolencias como las siguientes:
- Pueden prevenir el cáncer gracias al ácido láctico que contiene esta fruta y que inhibe la reproducción de células cancerígenas.
- Reducen el estrés gracias a los flavonoides que protegen las células neuronales.
- Previenen enfermedades degenerativas como el Alzheimer y la demencia, según la Alzheimer Association.
- Ayudan a dormir mejor por las noches si tomamos zumo de esta fruta media hora después de despertarnos y tras cada comida.
- Reducen los factores que provocan un colesterol alto, la hipertensión arterial y diabetes gracias a que regulan los genes relacionados con el metabolismo de la grasa y la glucosa.
- Alivian el dolor de las lesiones gracias a que contienen fitoquímicos reducen la inflamación y los daños y además, reparan las fibras musculares gracias a las antiocianinas, por eso es una fruta muy recomendada por entrenadores y preparadores físicos.