Estas fechas son muy señaladas para los católicos. Se trata de un momento de recogimiento y de recordar la Pasión de Cristo. Las procesiones, los oficios, la misa de Ramos o la de Resurrección, las visitas a diferentes iglesias y en definitiva en ambiente de las ciudades hace que estos días sean especiales para creyentes y agnósticos.
Además, coincidiendo con las festividades de Jueves Santo (en algunos sitios en su lugar festejan el Lunes de Pascua) y Viernes Santo, son días también para pasar en familia, visitar otros lugares y disfrutar de nuestros nietos, que no siempre es fácil juntar cuatro días de vacaciones.
Por eso, para que nuestros hijos y nietos se queden con buen sabor de boca y así vengan más a visitarnos, os proponemos que les deleitéis con estos riquísimos platos…
1. Huevos rellenos de atún:
2. Buñuelos de bacalao:
3. Pestiños:
Foto: Google Imágenes