A pesar de que la mayoría de las cosas que se fabrican hoy en día están diseñadas para que duren un tiempo determinado (obsolescencia programada) las actuales circunstancias económicas están provocando que nos replanteemos nuestro excesivo consumismo y que aprovechemos al máximo los bienes que tenemos, alargando su ‘vida’. Sin embargo, aún hay muchos productos que cuando nos deshacemos de ellos aún pueden ser utilizados por otras personas que sí les ven una utilidad. Un modo de localizar estos bienes de consumo usados, fomentar su reutilización e intercambio al tiempo que se reduce la producción de residuos es a través de la Red. Un ejemplo es la web que ha puesto en marcha el Gobierno de Navarra y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona: www.yonolotiro.es.

La web ya cuenta con casi cuatro meses de vida y funciona mediante la inserción de anuncios gratuitos en los que se ofrece alquiler, regalo, venta, búsqueda o trueque. Se estructura en tres ámbitos dirigidos a organismos públicos, empresas y ciudadanía, y el usuario puede decidir que su anuncio sea visible en los tres espacios o únicamente en el suyo.

Es difícil contar con cifras exactas de los residuos voluminosos (colchones, muebles, electrodomésticos, etc.) que se genera, aunque se calcula que suponen un 3,45% de los residuos sólidos urbanos. Desde la Fundación de Traperos de Emaús Navarra se estima que en 2010 se recogieron 10.400.296 de kilos de residuos voluminosos en las 13 mancomunidades en las que trabaja.

www.yonolotiro.es ha sido desarrollada por el Centro de Recursos Ambientales de Navarra (CRANA) y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, y forma parte de las acciones impulsadas en el Plan Integrado de Gestión de Residuos del Gobierno de Navarra (PIGRN) 2010-2020, que tiene, entre otros objetivos, la reducción de los residuos urbanos y la reutilización de voluminosos en un 10 por ciento. Pero esta no es la única iniciativa, ya que en Navarra existen otras experiencias de reutilización impulsadas fundamentalmente por ONGD y entidades locales. Y es que la promoción de mercados de segunda mano, tanto virtuales como presenciales contribuyen a la revalorización de objetos que a menudo se consideran residuos.

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