El 83,5% de las personas mayores dependientes están atendidas por familiares, una tarea que no sólo repercute en los propios cuidadores sino en el resto de la familia, ya que la dificultad de compatibilizar trabajo y cuidado del mayor (el 50% de los cuidadores en España no pueden plantearse trabajar y han abandonado su trabajo o han reducido su jornada laboral), la reducción o incluso la desaparición del tiempo libre suele provocar conflictos en la familia, además del aislamiento social del cuidador y secuelas en su salud.
Para evitar o al menos paliar esta situación diferentes instituciones, desde ayuntamientos a ONG’s, cuentan con programas de apoyo, bien basados en el llamado respiro familiar (proporcionan personal o un centro durante un pequeño periodo de tiempo para permitir al cuidador descansar de sus responsabilidades) o bien con cursos en los que se enseñan técnicas de relajación y de cuidado que faciliten esta tarea. Pero la Unión Democrática de Pensionistas (UDP) ha querido dar un paso más combinando ambas vertientes y para ello hace unos días ha puesto en marcha el programa Cuidarelax, un proyecto (financiado por el Ministerio de Sanidad y Política Social, a través de la convocatoria de IRPF) pionero al conjugar estrategias clásicas de apoyo a cuidadores con una novedosa actividad como es el alojamiento en un balneario durante un fin de semana, donde se aúnan los tratamientos termales, el ocio y la psicoeducación.
Y es que le cansancio y el deterioro físico que siente un cuidador no es una sensación. Es algo real. No hay que olvidar que la edad media de los cuidadores es de 52 años y que un 20 % son mayores de 65 años, a lo que hay que unir el hecho de que cuidar día a día a una persona mayor dependiente puede acarrear asimismo consecuencias psicológicas negativas como la tristeza, desesperación, indefensión y la desesperanza, junto a los primeros síntomas de depresión. Por este motivo el programa diseñado por la UDP incluye formación impartida por profesionales expertas/os en gerontología, dependencia y género, aborda contenidos sobre habilidades que favorecen la identificación, el aprendizaje y la potenciación de recursos psicológicos específicos para la mejora en la gestión emocional, incorporando el uso de técnicas de risoterapia y desarrollo del buen sentido del humor, potenciando y reforzando la práctica de actividades gratificantes y de ocio, así como aspectos que favorecen la conciliación y la corresponsabilidad en el cuidado favoreciendo también la mejora en el apoyo social familiar (corresponsabilidad en el cuidado) y la relación entre los cuidadores beneficiarios del programa (red de apoyo entre cuidadores familiares).
Pero al mismo tiempo el programa permite a los asistentes disfrutar de tiempo libre, relajarse, intercambiar experiencias y recobrar el sentido de la labor que están haciendo y mostrando que ésta, a pesar de las dificultades, puede ser muy satisfactoria, llegando incluso a hacer que los cuidadores descubran que poseen unas cualidades que hasta entonces no conocían, de forma que no pocos de ellos manifiestan haber “crecido” como personas después de enfrentarse a situaciones muy dolorosas, por alguien al que además quieren.
El programa ha sido estructurado en 5 sesiones formativas con las que se pretende alcanzar varios objetivos:
- El descanso lúdico del cuidador, con el propósito de retomar las relaciones de pareja. Para ello se ofrecen las herramientas necesarias para que aprendan a disminuir el estrés provocado por años de cuidados de la persona mayor a través de terapias de apoyo y autocuidado personal.
- Apoyar a las parejas cuidadoras de un mayor dependiente, apostando por la conciliación familiar.
- Buscar y crear un espacio de encuentro formativo entre los cuidadores familiares de personas mayores dependientes, para que no se sientan solos, tomando conciencia de que existen otras personas en su misma situación con las que pueden interactuar, compartiendo problemas y soluciones comunes.
- Crear una red de apoyo mutuo, entre cuidadores y profesionales, donde puedan expresar sus conflictos, experiencias y que sirva de apoyo a los/as cuidadores que con el tiempo se encuentren en su misma situación.
Pero este programa va más allá de un fin de semana y ofrece también a lo largo de todo el año apoyo psicológico individual, tanto por vía telefónica como personalmente, además de sesiones formativas para ampliar conocimientos acerca del autocuidado y el cuidado hacia personas mayores dependientes. Las personas interesadas en participar en este programa pueden informarse en el teléfono 91 542 02 67.