Está claro que la crisis está sacando a la luz muchas desgracias, sin embargo, hay algunas noticias, como la que hoy analizamos, que aportan un rayo de luz y nos devuelven en cierto modo la esperanza.
Hace apenas un día, una conocida familia de A Pobra, ha puesto tres viviendas a disposición de quienes están sufriendo el drama del desahucio. Se trata de una donación anónima y totalmente desinteresada; esta familia gallega no va a pedir nada a cambio de sus viviendas, ni si quiera el pago de un alquiler simbólico, sólo tendrán que encargarse del pago de la luz, el agua y los servicios básicos que contraten.
La noticia ha saltado a los medios a través de José Manuel Pena, portavoz de la plataforma Stop Desahucios del Barbanza, quien habla de los donantes como una familia que siempre se ha mostrado solidaria con el resto de sus vecinos. Los pisos serán cedidos a quienes más lo necesiten, teniendo en cuenta como cuestiones como la renta per cápita o el número de hijos.
Pena ha querido resaltar la importancia de este gesto, incidiendo en que, dadas las circunstancias, es absurdo tener pisos vacíos cuando hay gente que está viviendo en la calle.
Esperamos que este gesto se repita y que, quienes tienen pisos vacíos y pueden cederlos, se contagien de esta genrosa actitud, de la que cada vez encontramos más ejemplos por todo el país.
