Estamos a pocos días de cambiar de temporada y una de las peculiaridades meteorológicas de la estación en la que estamos a punto de entrar es la nieve. Su presencia pone a nuestro alcance multitud de actividades de ocio y tiempo libre, siempre en contacto con la naturaleza, que son accesibles también para mayores.
La más sencilla es el montañismo o trekking, aunque simplemente podíamos llamarlo el “paseo por la montaña”. Disfrutar del paisaje, caminar sobre la nieve, sentarse en medio del campo o hacer una pequeña marcha es algo que todos podemos hacer. Se trata además de una actividad muy beneficiosa para mantenernos activos; para cuidar nuestro corazón y también el espíritu.
Quizá sea un poco más arriesgado aprender a esquiar o a hacer snowboard a determinadas edades, aunque se ofertan cursillos especializados orientados a todo tipo de público y, si la salud acompaña, no existe ningún impedimento para lanzarse a la aventura.
Una opción menos aventurera tal vez sean los paseos en trineos tirados por perros. Muchas estaciones de esquí españolas ofrecen este tipo de excursión que duran entre media hora y una hora y media. Se trata de una experiencia única que permite disfrutar de paisaje conduciendo tú mismo el trineo. Los paseos también pueden ser nocturnos e incluso combinarse con otras actividades, como la construcción de un iglú donde pasar la noche.
Además de las citadas, existe una oferta casi interminable de actividades relacionadas con la nieve. Subir en motos de nieve, jugar al paintball, conducir karts sobre hielo, hacer parapente, mountain bike o, sencillamente, deslizarse en trineo. Hay actividades para todos los gustos, lo imprescindible son las ganas de disfrutar de la naturaleza, combinadas con una pizca de espíritu aventurero.
