A lo largo de esta semana, la Red invade Asturias en Internet Meeting Point, foro organizado por El Comercio Digital que reúne a los principales expertos en la Red y en el que se explorarán los avances de las nuevas tecnologías, se debatirá sobre las tendencias de los internautas como parte de la sociedad, y se analizarán la web 2.0 y los blogs. En el marco de este encuentro, hoy se celebra un taller gratuito de creación de blogs dirigido a mayores.
Los profesores de este taller, algunos autores de Blogoff –informática para los que no saben de informática-, ya han enseñado a mayores a navegar por Internet y manejar algunas de sus herramientas. Estos días han dejado sus interesantes conclusiones sobre la relación de los mayores e Internet en su blog, ¿las compartes?
- Desorientación por falta de señalización. Como en las carreteras para llegar a un destino, si el camino no estaba bien señalizado aunque lleguemos finalmente, nos cuesta recordar qué ruta seguimos. En La Red ocurre lo mismo. Los que no hemos nacido en la era digital debemos aprender el camino desde el principio para saber cómo orientarnos navegando por Internet e interpretar sus señales y, como los nativos de las nuevas tecnologías, caminar sin perdernos. A los seniors no se nos ha enseñado, nos hemos lanzado –por necesidad laboral, familiar o inquietud- en la mayoría de los casos…
- Internet no está diseñado para ir aprendiéndolo desde lo básico. Por ejemplo: si introduces una dirección URL mal, nada te explica porqué está mal y aparece el desconcierto; pulsamos compulsivamente a la opción Atrás o abrimos nuevas ventanas hasta que funcione…
- Un error muy común en España es enseñar a usar a la gente programas, pero no el ordenador. Así, si hemos aprendido a navegar en Explorer de memoria puede que si nos cambian de navegador nos bloqueemos. La solución: conocer las posibilidades que te ofrece tener un PC e Internet, su sentido y a partir de ahí los programas que las multiplican.
A pesar de estos contras, los profesionales que imparten estos talleres se han encontrado con un pro que los compensa: las ganas de los mayores por aprender cada vez más el uso y utilidad de las tecnologías.
