Por suerte, cada vez estamos más concienciados de lo importante que es utilizar la protección solar adecuada dependiendo de nuestro tipo de piel, pero siguen existiendo dudas a la hora de elegir la crema solar que mejor nos viene para cuidarnos.
Te damos algunas soluciones que nos facilita la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV):
- Debemos aplicarnos la crema una media hora antes de salir de casa, de esta manera nos aseguramos la absorción de la misma y el cuidado de nuestra piel comenzará antes.
- Se recomienda utilizar cremas con un factor de protección mínimo de 30 y aplicárnosla al menos cada dos horas. De esta manera, nos aseguramos un verdadero cuidado de nuestra piel frente a las agresiones de los rayos del sol.
- Es importante que volvamos a ponernos crema cada vez que nos bañemos ya que aunque existen en el mercado multitud de productos resistentes al agua, lo cierto es que cuando nos secamos con la toalla nos quitamos hasta un 80% de la crema.
- Los días nublados también debemos utilizar la crema con protección solar, ya que el sol sigue calentando detrás de las nubes y es, incluso, más peligroso, puesto que no notamos tanto el calor y sin embargo está quemando nuestra piel igualmente.
- Generalmente, las cremas caducan a las 9 ó 12 meses, por lo que lo ideal es no utilizar las de años anteriores ya que pueden haber perdido la efectividad. Para saber cuánto tiempo dura podemos mirar en la parte posterior del tarro, allí vendrá un dibujo de un bote con un número dentro, son los meses que aguanta en perfecto estado una vez abierto. Otra opción es comprobar el olor o el color de la crema, que cuando está caducada suele cambiar a peor.
- Evitar las horas centrales del día, de 12 a 17h., que es cuando los rayos del sol son más dañinos, utilizar sombreros o gorras, gafas de sol e incluso ropa para cubrir las zonas más sensibles.