Hacernos cabañas, escondernos en cajas decoradas con motivos futuristas, jugar a dueños de grandes palacios… con seguridad casi todos los que peinamos canas nos divertimos en su momento imaginándonos amos y señores de casas verdaderas o de cuento.
Eran otros tiempos y no había las comodidades materiales de hoy. Pero seguro que a muchos de nosotros hubiésemos sufrido un pasmo si alguien nos hubiese regalado una casa a escala y con todos los detalles como las que Luxury Small World fabrica.
Mucho más que una casa de muñecas a lo grande, estos espacios para juegos se presentan como verdaderos lugares habitables en los que los niños cuenten con suficientes comodidades como para poder pasar allí todo el tiempo que les apetezca, solos o en compañía de amigos. En su versión “premium” pueden llegar a incorporar aire acondicionado o calefacción.
De momento el proyecto ha arrancado con unos cuantos modelos que representan un faro, dos casas tradicionales, un castillo, un barco, un cine y hasta una casa estilo Bauhaus. Pero entre los socios de Luxury Small World se encuentran un fabricante de maderas y un arquitecto, y el objetivo es que, además de expandir el negocio por países como Japón o los Emiratos Unidos Árabes, los futuros clientes puedan pedir sus preferencias a la carta.
Por ahora los precios de estos módulos, que van de los 6.000 a los 12.000 Euros y tardan 20 días en instalarse, pueden parecer muy exclusivos. Además, aunque no requieren cimientos, exigen disponer de un amplio jardín para poder instalarlas. Pero la intención de la empresa es que a medida que aumenten los pedidos se puedan producir casitas de forma más serial y así reducir sus costes, así como desarrollar diseños que puedan caber en interiores. El mobiliario en miniatura es otra de las líneas de negocio que pueden complementar esta propuesta tan original y bonita.
Al menos así la juzgan los clientes, a tenor de las buenas expectativas de crecimiento que declaran sus creadores.
