Lo recomendable es hacerlo. Sobre todo, si tenemos en cuenta que desde que cumplimos los 65 años y coincidiendo con nuestra jubilación, la esperanza de vida en España es de unos 20 años para las mujeres y 15 para los hombres, lo que quiere decir, que tenemos que planear en qué vamos a gastar nuestro tiempo a partir de ese momento.
Aún así, parece que no todos los españoles estamos preparados para aprovechar al máximo este periodo vital, y así lo demuestra el último Barómetro del mayor que realiza el Instituto de opinión simple Lógica para Unión Democrática de Pensionistas (UDP) en el que se dice que cuanto más mayores somos (de 85 años en adelante) más nos cuesta afrontar la jubilación.
De este estudio se obtiene que el 70% de los mayores se muestra partidario de prepararse previament para asumir la jubilación y que a pesar del desafío inicial que supone ese momento, 2 de cada 3 jubilados afirman que su vida no cambió en nada al cumplir los 65. De los que piensan lo contrario (un 34´7%) creen que su vida cambió por motivos de salud, por su situación económica o por las actividades que han podido realizar a partir de entonces y que antes no podían.
Y es que, aceptar que nuestra vida laboral llega a su fin, resulta a veces complicado (según este estudio, más a las mujeres que a los hombres) ya que en muchos casos lo asociamos a un parón en nuestra actividad diaria, cuando en realidad se trata de una nueva etapa, con más tiempo para disfrutar de nosotros mismos y de los nuestros. Un cambio de mentalidad y de prioridades que, si nos lo tomamos con filosofía, puede ser como vivir una segunda juventud.
