Echando una mano

Cada vez nos estamos encontrando con una población de mayor edad, al tiempo que el papel de los mayores de la sociedad va evolucionando, siendo cada vez más activos y participativos. Dentro de esta mayor actividad hay que destacar de manera especial el nuevo rol de VOLUNTARIOS. Y es que los mayores no son ya únicamente sujetos pasivos, receptores, del voluntariado, sino que se está adoptando una posición de protagonismo.

Teniendo en cuenta en las líneas anteriores, de cuando en cuando dedicamos este espacio a hablar de diferentes programas de voluntariado, especialmente si sus protagonistas son adultos mayores. En esta ocasión queremos hablar de la actividad que desarrolla UDP (Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España) con su Programa de Voluntariado Social de Mayores. Se lleva a cabo en seis comunidades autónomas, diez provincias y 40 localidades gracias al trabajo de 36 grupos de voluntarios y voluntarias (unas 3.000 personas) que llevan a cabo principalmente los servicios de compañía a personas mayores dependientes, bien en su propio domicilio o en residencias o viviendas tuteladas.

Este programa de UDP tiene su inicio en 1995, en la Federación Territorialde Pensionistas y Jubilados de UDP de Castilla-La Mancha. Ya en 1999 se presentó el proyecto en la convocatoria del IRPF, tomando así una dimensión nacional, aunque el programa de voluntariado define en cada lugar dos tipos de objetivos: Primero implantar un servicio de ayuda y cooperación social mediante el voluntariado social. Y en segundo lugar crear las bases para la expansión del voluntariado social a través de la capacitación de voluntarios y voluntarias como gestores y formadores de nuevas personas que puedan prestar servicios de voluntariado y ser gestor o gestora de los programas, siempre con el propósito de proporcionar el calor humano, la compañía y la amistad que las personas mayores necesitan.

Pero la buena voluntad de ayudar a otros miembros de nuestra sociedad no es suficiente. Es necesario saber ‘por dónde se pisa’, el terreno en el que nos movemos. Por ello, desde Argentina, Alerta Mayor se ha puesto en marcha un curso de voluntariado on line, es decir, a través de Internet, diseñado por y para mayores y coordinado por Jaime Fischer, Pte. de Caminos de Convivencia para el Diálogo y la Paz Social Asociación Civil.

El curso consta de 18 clases, una a la semana, en las que se abordarán 8 grandes temas: El facilitador comunitario, Las herramientas y técnicas del facilitador, Las organizaciones y el trabajo en red, Los derechos Y servicios, Relaciones intergeneracionales-cuidados, Políticas sociales, planificación, proyectos, Comunicación y difusión de las acciones y Centro de voluntariado. Funcionamiento.

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