En torno a 1940 un grupo de amigos, preocupado por proteger el auténtico espíritu de la Navidad, comenzó a montar belenes en las calles y las tiendas de Madrid, para salvaguardar de este modo una tradición popular muy arraigada, pero que podía desaparecer dada la fuerza con la que estaban entrando en nuestro país nuevas costumbres navideñas, basadas en un espíritu más comercial. Desde que en 1947 se montara el primer Belén Social en la Sala del Monte de Piedad de Caja Madrid, los trabajos de la Asociación no han cesado sino que, por el contrario, cada año se prodigan más, mientras que sus propuestas van ganando en calidad.
Además de por sus propios montajes, la Asociación es conocida por la celebración de concursos de nacimientos, de felicitaciones, dibujos o carteles cuya temática gira en torno al tema de la Natividad. Actualmente existen más de mil asociados por todo el mundo, unidos con el fin de que en Madrid se sienta y se viva la Navidad a través del Belén.
Los montajes que la Asociación ha presentado este año en la capital ya se pueden visitar. Sin duda, el más representativo de todos ellos es el de la Comunidad de Madrid; situado en plena puerta del Sol y accesible desde la calle del Correo, está accesible entre las 10 y las 21 horas. Se trata del Belén más visitado de la capital y, en esta ocasión, presenta una curiosa novedad: puede ser transitado por el público. El montaje, de gran realismo, cuenta con cerca de 500 figuras artesanales y más de un centenar de edificios, abarcando una superficie de cerca de 150 metros cuadrados.
Aunque quizá no sean tan impresionantes, es posible que sea más llevadero disfrutar del resto de los montajes de la Asociación, ya que aglutinan mucha menos afluencia de público. El de la Junta Municipal de Arganzuela –Paseo de la Chopera, 10- podrá visitarse hasta el próximo 10 de enero; el del Monasterio de Santa Isabel –Calle Isabel, 48 bis-, hasta el 15 de enero; también pueden verse el de la Confederación Española de Cajas de Ahorros -Avenida de Bruselas, 37- y el del Hospital de San José, en Getafe.
Todas ellas son excelentes propuestas para disfrutar del tiempo libre, deleitarse con las cualidades artísticas de los montajes y disfrutar plenamente la Navidad, con todo su sentido trascendente.
