Famosos y ricos como el futbolista David Beckham, el antiguo intérprete de James Bond, Roger Moore, o el propietario de los almacenes Harrods, Mohammed Al-Fayed, son algunos de los componentes del exclusivo grupo de personas que acuden a las tiendas Billionaire, propiedad del millonario italiano Flavio Briatore, a adquirir moda para hombre.
De momento, sólo hay cinco situadas en los selectos destinos que eligen los más ‘afortunados’ del planeta, aunque se planea que para 2009 haya hasta 20 tiendas Billionaire donde ofrecer artículos de lo que llama ‘alta costura italiana”, como camisas con relojes montados en los puños y corbatas adornadas con botones de cristal.
Briatore, actual director del equipo de Renault de Fórmula 1 y antiguo director de la compañía de moda Benetton, es uno de los hombres más ricos del mundo y dirige sus negocios a los que son como él, ya que según ha reconocido, es un mercado más seguro. El rango de precios que se pueden encontrar los multimillonarios que compren en su selecta boutique se sitúa entre los 220 euros para una corbata hecha a mano, hasta los 26.350 de un traje a medida con hilo de platino. Billionaire también vende, con precios entre los 7.300 y los 730.000 euros, una gama de joyería masculina con adornos con el logo de la firma, B, y un reloj con la esfera de oro rodeada de 44 diamantes rectangulares.
Con el mismo nombre, el descubridor de Fernando Alonso posee un club nocturno en la isla mediterránea de Cerdeña, cita imprescindible para el selecto y variopinto grupo de pudientes que veranean allí, y que cada año logra ingresos millonarios.
Sin embargo, las vista ‘de oro’ de este empresario no termina aquí. Su último proyecto: un complejo playero de lujo en Malindi, Kenia, con 25 ‘supersuites’, 20 apartamentos de hasta 1.000 metros cuadrados, 4 villas también de 1.000 metros cuadrados, más un casino y un club nocturno.
