Septiembre no suele ser el mejor mes del año para la economía familiar y éste va camino de no ser una excepción. El comienza del curso nos sorprende con subidas en el precio de alimentos de primera necesidad como el pan, la leche, los huevos, la cerne de pollo y de cerdo. Un encarecimiento consecuencia del gran crecimiento del coste de los cereales que afecta sobre aquellos productos alimenticios que proceden directa o indirectamente de los mismos.
El aumento de la demanda del cereal a nivel mundial se ha resentido en el sector agroalimentario y se ha acabado notando en la cesta de la compra. El pan está siendo el producto más afectado y se prevé que antes de que finalice el año su precio sea casi el doble que el actual, ya que la harina, materia prima necesaria para la elaboración de pan, se ha encarecido desde primeros de año hasta septiembre un 40% y puede seguir creciendo.
La leche tampoco se queda atrás. Según la Federación Nacional de Industria Láctea, a finales de año pagaremos un euro por litro de leche. La subida afectará a todos los productos lácteos –queso, yogures y demás derivados de la leche-, así como a los huevos que pueden costarnos hasta 15 céntimos más cada docena.
Por su parte, la Asociación Española de Fabricantes de Pastas Alimenticias (Aefpa) aha advertido sobre el encarecimiento de su materia prima, lo que les ha llevado a elevar los precios, aunque la subida será menor que el de la leche, pan y huevos.
Habrá que agudizar el ingenio y ‘reestructurar’ la lista de la compra para que la llamada cuesta de septiembre no se haga imposible de subir.
El aumento de la demanda del cereal a nivel mundial se ha resentido en el sector agroalimentario y se ha acabado notando en la cesta de la compra. El pan está siendo el producto más afectado y se prevé que antes de que finalice el año su precio sea casi el doble que el actual, ya que la harina, materia prima necesaria para la elaboración de pan, se ha encarecido desde primeros de año hasta septiembre un 40% y puede seguir creciendo.
La leche tampoco se queda atrás. Según la Federación Nacional de Industria Láctea, a finales de año pagaremos un euro por litro de leche. La subida afectará a todos los productos lácteos –queso, yogures y demás derivados de la leche-, así como a los huevos que pueden costarnos hasta 15 céntimos más cada docena.
Por su parte, la Asociación Española de Fabricantes de Pastas Alimenticias (Aefpa) aha advertido sobre el encarecimiento de su materia prima, lo que les ha llevado a elevar los precios, aunque la subida será menor que el de la leche, pan y huevos.
Habrá que agudizar el ingenio y ‘reestructurar’ la lista de la compra para que la llamada cuesta de septiembre no se haga imposible de subir.
