El viernes a mediodía se daba el pistoletazo de salida para esta Semana Santa y muchos se han lanzado a la carretera rumbo a su destino, pero como otras tantas veces, algunos no han llegado, pagando con su vida el peaje de la carretera.
14 accidentes con 16 muertos, siete heridos graves y otros siete leves, es el resultado de este fin de semana, el primero de la operación especial de tráfico que se ha puesto en marcha con motivo de estas vacaciones y que durará hasta las 24 horas del 5 de abril, cuando se ponga el punto final de la operación retorno.
Según las previsiones de la Dirección General de Tráfico (DGT) habrá en esta Semana Santa 14,4 millones de desplazamientos por carretera, cifra similar a la del año pasado cuya operación se saldó con 47 fallecidos y 286 heridos de gravedad. Además, se espera que el momento más crítico sea la noche del miércoles al Jueves Santo, que suele ser el de más tráfico de todo el año (el año pasado entre las 3 de la tarde y las 11 de la noche del miércoles se produjeron más de 120 km de retenciones en las horas punta). Para afrontar este volumen de coches en la carretera se va a movilizar a 9.800 agentes de la Guardia Civil de Tráfico, 500 más que en el 2009 (un récord en la historia de operativos de la DGT en Semana Santa) y se habilitarán carriles reversibles y adicionales con conos en los momentos de mayor circulación.
Uno de los principales temores de la DGT es que este año la llegada del buen tiempo anime a los motoristas a salir masivamente a las carreteras, pudiendo aumentar el número de accidentes, no porque los moteros sean responsables de los siniestros, sino porque las motos son vehículos más expuestos al riesgo. También se ha hecho un llamamiento para moderar la velocidad y extremar la precaución en los desplazamientos por la tarde y en los que se hagan por las carreteras secundarias, que es donde se concentran más accidentes en estas fechas.
En total, hasta el 28 de marzo, se llevan contabilizados 330 muertos, 118 menos que hasta la misma fecha del año pasado, lo que representa un descenso del 26,33%, pero no hay que olvidar que tradicionalmente la Semana Santa ha sido un periodo duro en materia de siniestralidad. Así pues, precaución, precaución y más precaución es el consejo que se puede dar a aquellos que se lancen estos días a la carretera para que sus vacaciones no acaben siendo un viaje sin destino.
