La Capital ya se ha vestido de fiesta. Calles, tiendas, Iglesias y espacio urbano han sacado sus mejores galas para recordarnos que ya queda menos de un mes para una de las fiestas más esperadas del año, sobre todo por los más pequeños de la casa.
Es, por tanto, una ocasión fantástica para dejarse llevar por la ilusión de los niños y, aprovechando sus vacaciones, compartir con ellos nuestro tiempo libre; ya sea por puro placer o por echar una mano a sus padres, si no han podido cogerse vacaciones.
Una de las ideas más bonitas -y también baratas- es disfrutar de las luces que todos los años decoran alegremente las calles más importantes de la ciudad. Para hacerlo, nada mejor que subirse al “Navibús” que, por sólo un euro y medio (gratis para los menores de 7 años), ofrece vistas panorámicas de las luces más impresionantes, obra de algunos de los mejores diseñadores españoles.
Otro plan interesante puede ser acercarse al mercadillo de la Plaza Mayor; no hace falta comprar, basta con disfrutar del ambiente, asomar la cabeza entre los puestos -donde encontraremos desde belenes artesanales hasta artículos de broma, pasando por los preciosos abetos naturales- y dejarse llevar por el espíritu navideño. Tal vez, luego, sea la ocasión perfecta para acercarse a Cortilandia, donde el espectáculo musical que se repite un año tras otro nunca defrauda a los más pequeños. Y, para terminar, nada mejor que disfrutar de un buen chocolate caliente -el tiempo lo pide a gritos- en algunas de las chocolaterías tradicionales del centro (Valor, San Ginés…). Eso sí, recomendamos armarse de paciencia, sea la hora que sea, el centro suele concentrar a miles de personas estos días.
Desde la Plaza Mayor parten distintas visitas guiadas de la ciudad -algunas diseñadas específicamente para niños-a través de sus barrios, de sus belenes más representativos e incluso a descubrir sus leyendas. Por otro lado, en la Plaza de Felipe II ya es tradicional montar una pista de patinaje sobre hielo. Otras, como la de Jacinto Benavente, la de la Santa Cruz o Plaza de España, albergan interesantes mercadillos navideños.
Todo está pensado para que disfrutemos al máximo de la Navidad estos días y, sobre todo, para que conservemos y cultivemos la ilusión de los más pequeños que, sin duda, alcanzará su punto álgido el día de la fastuosa Cabalgata de Reyes.
