Los abuelos son la pieza clave para la conciliación. Siempre dispuestos a echar una mano y a aprender. Y es que como consecuencia de la crisis y de los problemas de los padres a la hora de conciliar su trabajo con el cuidado de los hijos, pasan muchas horas con sus nietos. Son cada vez más frecuentes los casos en los que la educación de los menores recae más en los abuelos que en los propios padres. La creación de “La Escuela de Abuelos” es una iniciativa destinada a abordar el desarrollo de esta fundamental tarea. Lo hemos hablado en ocasiones anteriores, pero conviene recordar los datos.
La “Escuela de Abuelos”, que se inició en 2012 desde la Dirección General de Atención a la Dependencia y al Mayor de la Comunidad de Madrid, tiene como objetivo reforzar la figura del abuelo educador y “canguro”, potenciar el cambio de su imagen en la sociedad y, al mismo tiempo, facilitar herramientas que permitan definir su propio espacio. Desde hace 5 años vienen desarrollando esta acción en colaboración con diversos Ayuntamientos de la región, donde se promueve la ayuda a los abuelos que cuidan de sus nietos; para que afronten ese compromiso con tranquilidad y para que las partes implicadas (niño, abuelos y padres), obtengan un resultado de éxito.
Los datos hablan por sí solos: en la Comunidad de Madrid, aproximadamente un 25 % de los menores no escolarizados son cuidados por sus abuelos y el 48% de los abuelos que cuidan a sus nietos lo hacen de forma habitual. A un alto porcentaje de estos abuelos que realizan esta función cuidadora-educadora les resulta difícil asumir la complejidad y diversidad de los nuevos modelos de familia, así como afrontar las conductas y actitudes de las nuevas generaciones; esto les supone en muchos casos una carga extra de estrés y ansiedad.
En los talleres, los técnicos profesionales enseñan el papel de los abuelos en la sociedad actual, las necesidades psicológicas de la infancia y adolescencia, la comunicación con la familia, la prevención del maltrato infantil desde casa, el desarrollo de valores, los estilos de autoridad y su influencia en los nietos, la modificación del comportamiento con sus límites y normas (Lo hemos hablado en multitud de ocasiones: poner límites es esencial, porque dan seguridad a los menores y favorecen su desarrollo). También abordan el tema de la educación para un ocio de calidad junto con la prevención de adicciones, cómo apoyar a los nietos para mejorar el rendimiento escolar, así como promover una educación afectiva y sexual de calidad.
El taller tiene una duración de 20 horas, distribuidas en 10 sesiones de dos horas cada una. Los participantes, personas mayores de 65 años, son seleccionados por los Ayuntamientos que colaboran en el programa. En cada una de las sesiones se llevan a cabo distintas técnicas en grupo que favorecen la participación y el diálogo; se analizan casos concretos y se modera la discusión sobre determinados temas de interés, con la finalidad de reflexionar en grupo sobre criterios y pautas educativas sanas para el mejor desarrollo evolutivo de sus nietos, ya sean niños o adolescentes. Al finalizar el taller se hace entrega a los participantes de un diploma, como reconocimiento de ser “Un gran abuelo” por su esfuerzo e interés en el mismo. Unos 700 abuelos de la región han asistido a esta escuela en cinco años.
Antes los abuelos éramos solo una ayuda, un complemento. Ahora pasamos tantas horas con nuestros nietos que nos hemos vuelto imprescindibles y necesitamos ser también educadores. A nosotros va destinado el curso que imparte la Comunidad, ¿tú ya has participado en alguno? ¿Tu Ayuntamiento ha acogido esta iniciativa? ¡Queremos saberlo!
A continuación podréis observar cómo se desarrolla el programa, gracias al informativo de A3 que recientemente “se coló” en una de las aulas.
Actualizado: 31/10/2017
Foto: Google Imágenes
Vídeo: Antena 3 TV
