Nunca es tarde… es mucho mayor el número de personas de más de 65 años que no han podido ir al colegio, estudiar educación primaria, ni secundaria y, muy de lejos, superior, que el que si ha tenido esa suerte, según la Encuesta de Población Activa. Los cambios sociales de nuestra sociedad en los últimos cuarenta años –incorporación de la mujer al mundo laboral, reconocimiento de sus derechos civiles, prosperidad económica y paz- han permitido que esta situación se invierta con las nuevas generaciones. Pero también, han brindado la oportunidad a todos aquellos seniors que debieron renunciar, por diferentes motivos, a su educación, a retomarla.
Uno de los ejemplos de esta nueva posibilidad para los mayores son los cursos de alfabetización, de lecto-escritura, y cultura general, –en el que se ven materias como la gramática, historia, matemáticas, literatura y lectura comprensiva-, pregraduado, idiomas, ofimática e informática, que se imparten en los Centros Especializados en Atención a Mayores de la Conselleria de Bienestar Social de la Generalitat Valenciana.
Cerca de 12.000 personas acuden anualmente a estos cursos y cada vez son más los mayores que se lanzan a cursar estudios superiores o a apuntarse a diferentes actividades educativas, en su mayoría mujeres que en esta franja de edad duplican a los hombres en falta de formación. Concretamente, según datos de la Conselleria, la tasa de analfabetismo de las mujeres (9,8%) duplica a la de los hombres (4,7%) pero también son ellas las que más se deciden a salvar ese escollo y buena prueba de ello es que siete de cada diez estudiantes de 60 o más años son mujeres.
Aparte de formación, en estos centros se ofrece atención sanitaria, servicio de rehabilitación y espacios para el ocio, con el mejorar la calidad de vida de los mayores. Asimismo, se imparten otros talleres sobre prevención y mantenimiento de la salud, rehabilitación preventiva, de actividades físico-deportivas, de talleres ocupacionales y área social y educativa.
