¿Estaremos más cerca de encontrar la fórmula de la eterna juventud? Todavía no se ha experimentado en seres humanos, pero parece que un equipo científico (formado por americanos y chinos y liderado por el español Juan Carlos Izpisúa) ha descubierto una clave genética para detener el envejecimiento humano.
Al parecer, con ella se demuestra que las mutaciones genéticas del Síndrome Werner, causante de un tipo de enfermedad rara que consiste en un envejecimiento prematuro, suponen el deterioro de unos determinados paquetes de ADN, por lo que la mejor opción sería intentar detener ese proceso.
Este hallazgo supone encontrar una clave genética contra el paso de los años, algo muy valioso para tratar enfermedades propias de la edad adulta como el cáncer, la diabetes o el Alzheimer.
Haber identificado un mecanismo central del envejecimiento es, sin duda, una excelente noticia. Ahora sólo queda llevarlo a la práctica y conseguir esa vacuna ”milagrosa” capaz de frenar el envejecimiento y por tanto las enfermedades asociadas a él.
