La Organización de Consumidores y Usuarios toma el pulso a los seniors jubilados españoles en una encuesta sobre Calidad de vida tras la jubilación, el resultado: estamos bien pero no nos conformamos. En el estudio han participado 830 personas de entre 65 y 70 años a las que se les ha preguntado sobre su calidad de vida y circunstancias personales.
De acuerdo con la encuesta, el 80% de los seniors nos mostramos satisfechos con la vida que llevamos tras la jubilación y no nos quejamos demasiado de nuestro estado de salud –sólo es calificada de mala por un 3%-. Sin embargo, el tercio de los encuestados manifiesta su miedo a sentir soledad, y asegura estar poco apoyado socialmente, con carencias afectivas y materiales. Parte de este grupo de mayores que viven solos, no obstante, no ven del todo negativa su situación y reclaman más ayudas a domicilio y continuar jugando un papel activo en la sociedad.
Los principales apoyos con los que contamos y que, al mismo tiempo, más valoramos, son los de la pareja e hijos, familiares cercanos y amigos íntimos; y son pocos los seniors que afirman que nadie les toma en cuenta, pide consejo o ayuda. No obstante, y a pesar de que algunos de estos mayores requieren de ayuda para realizar las labores del hogar y el cuidado personal, una gran mayoría dice ser independiente.
En cuanto a nuestro papel en la sociedad, las principales quejas son: la escasez de ofertas de trabajo remunerado; las insuficientes ayudas que se dan a los mayores para vivienda o alojamiento y alimentación. Llama la atención que al menos un tercio de los que han participado en este estudio de la OCU continúa activo laboralmente, otro 26% está estudiando y un 18% declara realizar labores de voluntariado, señal de que los tiempos han cambiado y los seniors clamamos por el reconocimiento y apoyo a nuestro papel activo en la sociedad.
Y es que la jubilación puede ser el principio de muchos proyectos.
