Si la edad ya está dejando de ser un obstáculo para ir a la universidad, ahora ni el tiempo ni el espacio van a ser tampoco barreras. Ello gracias a un nuevo proyecto, VirtualEdu -www.virtualedu.es-, un portal de cursos virtuales que permite seguir las sesiones y conferencias en directo e intervenir en las mismas sin estar in situ, sino a través del ordenador por medio del chat. La plataforma que se utiliza para impartir las sesiones (Virtualmeet) permite además compartir vídeos, pizarra digital, Powerpoint, imágenes… haciendo más amenas e instructivas las sesiones.
Dentro de la programación diseñada por VirtualEdu se encuentra la UPM(Universidad para Mayores). Consiste en conferencias culturales de 1 hora de duración, cada día de la semana y abordando distintos ámbitos como la Historia, arte, ciencia, salud, cultura, música, familia, educación…
Dirigido a todo tipo de público como jubilados, amas de casa y gente con inquietudes culturales en general, podrán disfrutar de unas conferencias (en directo, de 11 a 12 h oras) de nivel medio, asequibles y diseñadas para entretener y aprender. Además, si las horas no nos convienen, las sesiones quedan grabadas y puede accederse a ellas en cualquier otro momento.
Está previsto que el proyecto se inicie el próximo mes de noviembre y se desarrolle durante los meses de curso escolar. El coste es de 40 €/mes y quien lo desee podrá estar un mes a prueba de forma gratuita.
Este es un ejemplo de las cada vez más universidades y centros de formación que se han lanzado a la aventura en Internet aprovechado las herramientas 2.0 para hacer de esta fórmula una formación cercana e interactiva, que no se basa tanto en los instrumentos tecnológicos como en una buena planificación de la docencia en los entornos virtuales. Y es que avances en la red como las videoconferencias, las pizarras digitales o los juegos de simulación, permiten a los estudiantes una formación completa y garantizan la comunicación con profesores y con el resto de alumnos, lo que evita que se extrañen las clases presenciales evitándose así el abandono que se suele dar en los estudios a distancia.
