Los mayores somos los más afectados por los problemas de insomnio. Las preocupaciones, la vida sedentaria o los dolores, hacen que muchas veces nos veamos obligados a medicarnos para poder conciliar el sueño. Pero ojo porque las cifras son alarmantes, según la Sociedad Española del Sueño, el 70 % de los ancianos consume habitualmente hipnóticos, y el 17% asegura que no puede dormir sin este tipo de medicamentos.
Un riesgo demasiado alto si tenemos en cuenta que lo recomendable es consumir estos productos sólo si son recetados por un médico y como máximo 5 ó 6 semanas. Los especialistas aseguran, además, que mucha gente lleva medicándose a diario desde hace 20 ó 30 años, algo que hace que estos relajantes musculares pierdan su efecto y generen dependencia. A esto debemos sumar que su consumo crónico se asocia con un mayor riesgo de deterioro cognitivo.
El ejercicio, sin embargo, parece ser el mejor aliado para dormir bien, ya que incrementa la actividad metabólica, la del sistema nervioso y la temperatura corporal, tres factores que favorecen al sueño siempre y cuando el ejercicio se haga 3 ó 4 horas antes de irse a la cama.
Hacer deporte siempre es bueno para nuestra salud, pero es importante tener en cuenta la hora a la que lo practicamos si lo que pretendemos es mejorar nuestro sueño. Lo ideal para esto es hacerlo unas horas antes de irnos a dormir, ya que si hacemos ejercicio por la mañana, tenemos todo el día para descansar y si lo hacemos justo antes de acostarnos liberamos demasiada adrenalina y podemos provocar el efecto contrario y estar más espabilados.
Bailar, dar largos paseos con alguna amiga, nadar e incluso subir las escaleras de casa son formas maravillosas de hacer ejercicio siempre y cuando lo hagamos con cierta periodicidad. Lo recomendable es dedicar unos 30 minutos tres o cuatro veces por semana para que notemos los efectos en nuestro sueño y en seguida podremos comprobar que nos dormimos más rápido y de manera más profunda y nos despertamos menos veces por la noche, por lo que funciona mucho mejor que cualquier ansiolítico o antidepresivo.
Y si además de hacer ejercicio procuramos evitar las comidas copiosas, mantener ciertos horarios a la hora de acostarnos y levantarnos, intentamos no echarnos la siesta y no hacemos cosas que puedan espabilarnos antes de irnos a la cama como ver una película de miedo en poco tiempo dormiremos toda la noche a pierna suelta.
[…] es dormir al menos 8 horas al día. Las personas mayores, a veces, tenemos problemas a la hora de conciliar el sueño, por lo que es conveniente crear un ambiente adecuado, con poca luz, ni frío ni calor, sin ruidos, […]