La memoria, como cualquier parte de nuestro cuerpo, nota el paso del tiempo. Aproximadamente a partir de los 40 años van mermándose de forma natural las capacidades cognitivas relacionadas con la memoria. De ahí que sea tan importante entrenarla y ejercitarla para retrasar, frenar o revertir su deterioro. Tanto es así que cada año se multiplican los Talleres de Memoria dirigidos a seniors sin enfermedades crónicas que afecten a esta capacidad, iniciativa de las administraciones municipales y organizaciones sin ánimo de lucro.
Madrid. La Concejalía de Servicios Sociales y Mayores Ayuntamiento de Coslada ha puesto en marcha en uno en el Centro de Mayores de Ciudad 70 uno de estos talleres para los mayores del municipio. En él se llevarán a cabo actividades mentales científicamente estudiadas que posibiliten a los seniors que participen agilizar los procesos cerebrales que facilitan el recuerdo y la cognición. El taller se celebrará semanalmente con el objetivo de mantener y/o recuperar las habilidades cognitivas que inciden en la memoria: capacidades de registro (atención y percepción), almacenamiento – retención (organización, asociación, visualización y repetición) y recuperación (referencias y contexto).
El taller está destinado a personas con déficit de memoria que no presentan trastornos neurológicos y a personas con trastornos cognitivos leves, pero sin repercusiones en las actividades de la vida diaria.
Jaca. La Cruz Roja de esta localidad aragonesa ha convocado, dentro del proyecto Reforzando la Vida, un taller de memoria dirigido a las personas mayores en el que, de manera personalizada de acuerdo con las necesidades de los participantes, se trata de mejorar la capacidad cognitiva, realizando actividades de atención, concentración o percepción. Además, se les enseñan trucos para ejercitar la memoria y afrontar problemas cotidianos.
Mallorca. El Institut Mallorquí de Asumptes Socials (IMAS), perteneciente al Consell de Mallorca, organiza desde hace años cursos para que los mayores de 60 años aprendan a entrenar la memoria y sus habilidades sociales con el objetivo de mejorar su calidad de vida. Suelen comenzar cada mes de octubre y se imparte una clase semanal de una hora en la que los participantes realizan diferentes ejercicios y trabajos que les ayudarán a enfrentarse a los problemas de falta de memoria.
