Cada vez nos sientan peor (al
tiempo que están aumentando su frecuencia) las llamadas comerciales ante las que
los consumidores se sienten indefensos. Ya en julio de 2010 el Instituto
Nacional de Consumo inició
una serie de actuaciones para solucionar las denuncias relacionadas con
el acoso telefónico que, desde principios de los 90, está calificado como “práctica comercial agresiva”, además
de que la Ley 29/2009 considera “desleal realizar propuestas no deseadas y
reiteradas por teléfono, fax, correo electrónico u otros medios de comunicación
a distancia”. A pesar de todo parece que todo esto es insuficiente, por
lo que la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, acaba de
anunciar que se va a proponer a las empresas de telecomunicaciones que habiliten
un sistema para que, en la misma llamada en que se realiza una oferta comercial,
se permita que el consumidor pueda decir que no desea recibir más llamadas.

Con el fin de que la fórmula que
se alcance permita garantizar “un equilibrio entre la acción comercial y el
respeto a los derechos de los consumidores”, el ministerio de Ana Mato pondrá
también en marcha una Comisión
Interministerial junto con los Departamentos de Justicia y de Industria, Energía y Turismo.

En estos momentos los usuarios
que sufran estas llamadas comerciales constantes pueden ejercer el llamado Derecho de Oposición es el que tiene la
persona afectada a que no se lleve a cabo el tratamiento de sus datos personales
o se cese en el mismo.
Este derecho se ejerce a través de una solicitud que ha de dirigirse al
responsable del tratamiento de nuestros datos de cada una de las compañías que
contacta con nosotros, quien debe resolver el caso en un plazo de 10 días
hábiles desde que recibe la misma. En caso que no lo hiciera la persona afectada
puede reclamar ante la Agencia de Protección de Datos su derecho a la
Oposición.

Otro medio
para evitar recibir llamadas comerciales no deseadas es inscribirse en la Lista Robinson, un servicio de exclusión
publicitaria disponible para los consumidores gestionado por la Asociación
Española de la Economía Digital, y creado conforme a lo previsto en la normativa
sobre Protección de Datos. La inclusión en esta lista es gratuita y se ha de
indicar el medio a través del cual no desea recibir publicidad (correo postal,
electrónico o a un número de teléfono concreto) de entidades con las cuales no
mantenga ni haya mantenido algún tipo de relación.