”Buscamos continuamente nuevas experiencias por todo el mundo, que te ayuden a aprovechar lo mejor que la vida puede ofrecerte…”. Desde hace aproximadamente ocho años, en Estados Unidos y Gran Bretaña vienen proliferando una serie de empresas que ‘venden sueños’, esto es, dedicadas al llamado marketing experimental. Este es el caso de La Vida es Bella, una compañía portuguesa que cumple ahora un año en España.
Tanto empresas como particulares han sucumbido ya a contratar sus servicios ya que, si bien entre las más de 1.200 experiencias de su catálogo, podemos encontrar precios para todos los bolsillos, las emociones resultan ser tan increíbles como prometen. Entre las llamadas experiencias top de La Vida es Bella encontramos un viaje a las ruinas del Titanic, conducir un coche de Fórmula 1, pasar unas vacaciones en el yate de Cristina Onassis, conocer a tu ídolo, o, por veinte millones de euros, contratar un programa de entrenamiento espacial en la Nasa durante ocho meses.
No obstante, hay ‘caprichitos’ más asequibles como tratamientos de belleza, baños de chocolate, cursos de fotografía natural, avistamiento de ballenas y delfines, paracaidismo, masajes faciales, viajes en globo… Experiencias al aire libre, para el cuidado personal, relacionadas con la velocidad, con el agua, los sabores, para niños, mayores, viajes de incentivos, para recién casados, … Lo que persiguen la mayoría de los clientes de este tipo de empresas es regalar, o regalarse, algo diferente, alejado de los presentes convencionales: regalar sensaciones.
Además de Portugal y España, La Vida es Bella se encuentra presente en Brasil, y entre los nombres para la próxima ampliación figuran Italia, Grecia y Suecia.
Para más información: http://www.lavidaesbella.es
