Como consumidor y usuario de diferentes servicios, ¿qué te gustaría pedir al futuro presidente del Gobierno? ¿Crees que los partidos políticos que optan al Gobierno de España están teniendo en cuenta los principales asuntos que preocupan a diario a los hogares españoles?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), entidad privada fundada en 1975 con el objetivo de asesorar a los consumidores y defender sus intereses, con motivo de las elecciones generales del 9 de marzo y del arranque oficial de la campaña electoral, este próximo fin de semana, ha enviado a los diferentes partidos políticos un conjunto de reivindicaciones que consideran fundamentales en materia de consumo. En total 13 puntos que coinciden con los grandes temas que afectan a la economía doméstica y que deben ser prioritarios para los diferentes representantes políticos.
En primer lugar, se pide la liberalización de la energía, para que cada hogar pague objetivamente sólo lo consumido. Para ello, sería necesario revisar el sistema de tarifas existente. El alarmante estado del acceso y pago de las viviendas tampoco debe pasar desapercibido para los políticos, como no lo es, desgraciadamente, para los contribuyentes. En este sentido, la OCU reivindica que se potencie el alquiler, se acabe con la especulación y se ponga freno a las desorbitadas subidas que sufre el precio de la vivienda en propiedad.
La subida de los precios en todos los sectores ha llevado a una situación preocupante de sobreendeudamiento de las familias españolas, que requieren de un organismo oficial y medidas concretas que les defiendan como consumidores. Según la Organización de Consumidores esto podría llevarse a cabo: mejorando el tratamiento de los consumidores en los procedimientos concursales, pasando a ser considerados acreedores preferentes; creando una Secretaría de Consumo dentro del Ministerio de Economía; transformando el Instituto Nacional de Consumo en Agencia Española del Consumo; o la suficiente flexibilidad para que se la Unión Europea pueda legislar en todos sus Estados en defensa de los consumidores.
También con el fin de mantener el nivel de protección de los consumidores, la OCU propone simplificar los trámites de reclamaciones; revisar los mecanismos de control de la publicidad engañosa; la creación de una Agencia Nacional de Seguridad de los Productos que informe sobre los riesgos de algunos productos; promover un consumo sostenible y responsable; endurecer la ley contra el tabaco y revisar la normativa sobre el derecho de huelga de algunos sectores.
En cuanto a la atención sanitaria, esta Organización reclama un nuevo sistema de información sobre las listas de espera que sea “público, transparente y comparable”; que limite claramente el máximo de espera.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), entidad privada fundada en 1975 con el objetivo de asesorar a los consumidores y defender sus intereses, con motivo de las elecciones generales del 9 de marzo y del arranque oficial de la campaña electoral, este próximo fin de semana, ha enviado a los diferentes partidos políticos un conjunto de reivindicaciones que consideran fundamentales en materia de consumo. En total 13 puntos que coinciden con los grandes temas que afectan a la economía doméstica y que deben ser prioritarios para los diferentes representantes políticos.
En primer lugar, se pide la liberalización de la energía, para que cada hogar pague objetivamente sólo lo consumido. Para ello, sería necesario revisar el sistema de tarifas existente. El alarmante estado del acceso y pago de las viviendas tampoco debe pasar desapercibido para los políticos, como no lo es, desgraciadamente, para los contribuyentes. En este sentido, la OCU reivindica que se potencie el alquiler, se acabe con la especulación y se ponga freno a las desorbitadas subidas que sufre el precio de la vivienda en propiedad.
La subida de los precios en todos los sectores ha llevado a una situación preocupante de sobreendeudamiento de las familias españolas, que requieren de un organismo oficial y medidas concretas que les defiendan como consumidores. Según la Organización de Consumidores esto podría llevarse a cabo: mejorando el tratamiento de los consumidores en los procedimientos concursales, pasando a ser considerados acreedores preferentes; creando una Secretaría de Consumo dentro del Ministerio de Economía; transformando el Instituto Nacional de Consumo en Agencia Española del Consumo; o la suficiente flexibilidad para que se la Unión Europea pueda legislar en todos sus Estados en defensa de los consumidores.
También con el fin de mantener el nivel de protección de los consumidores, la OCU propone simplificar los trámites de reclamaciones; revisar los mecanismos de control de la publicidad engañosa; la creación de una Agencia Nacional de Seguridad de los Productos que informe sobre los riesgos de algunos productos; promover un consumo sostenible y responsable; endurecer la ley contra el tabaco y revisar la normativa sobre el derecho de huelga de algunos sectores.
En cuanto a la atención sanitaria, esta Organización reclama un nuevo sistema de información sobre las listas de espera que sea “público, transparente y comparable”; que limite claramente el máximo de espera.
