La Fundación Pablo Hortsmann ha creado la primera crema que produce arrugas y lo mejor es que no pretende que le salgan a quien la utiliza sino a los niños y niñas de Kenia y Etiopía con los que esta fundación trabaja desde hace casi diez años.
Obviamente, lo de producir arrugas es una forma de hablar, la idea es que comprando esta crema se contribuya a mejorar la vida de estos pequeños y puedan crecer y llegar a tener arrugas.
Mientras en el ”primer mundo” nos preocupamos de manera desmedida por nuestro aspecto físico y hacemos todo lo posible por permanecer jóvenes y sin arrugas hasta la eternidad, no nos paramos a pensar que millones de niños en el mundo están deseando llegar a viejos y no morir de hambre, enfermedades o miles de necesidades.
La crema ”que produce arrugas” cuesta 25 euros y el 100% de los beneficios de la venta se destinarán íntegramente a proyectos educativos y sanitarios gestionados por la Fundación Pablo Horstmann para proporcionar asistencia sanitaria y educación a la infancia más vulnerable y necesitada en Kenia y Etiopía. Para comprarla solo tienes que pinchar en este enlace: COMPRAR CREMA y así cada vez que la utilices sabrás que has hecho feliz a alguien y ojo, ¡eso sí que rejuvenece!
En las redes sociales, la Fundación Pablo Hortsmann está utilizando el hashtag #DesmontandoMiBelleza para dar a conocer a mucha más gente esta maravillosa iniciativa que no sólo pretende alargar la vida de los más desfavorecidos sino ayudarnos a que nos valoremos no sólo por el físico sino también por el interior y nos sintamos a gusto con nosotros mismos.
Os dejamos el video de la campaña y os animamos a ayudar a estos pequeños a que se hagan mayores…
