¿Qué está cambiando en la sociedad? Hasta hace no demasiados años el modelo familiar más numeroso en España estaba compuesto al menos de cuatro o cinco miembros; ahora, sin embargo, son las parejas con uno o ningún hijo que representan el 21 por ciento de los hogares. Este es solo uno de los datos más llamativos del estudio realizado por el Instituto de Política Familiar a partir de cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Así, la media de personas que viven por hogar ha descendido a 2,7 personas y uno de cada cinco hogares (18 por ciento del total) cuenta con un solo miembro. En contraposición, los hogares con cinco o más miembros han descendido vertiginosamente, un 75 por ciento desde 1980, y actualmente sólo representan el 7 por ciento. Las principales causas de esta situación, según señalan desde el IPF, son los bajos índices de natalidad en los que se mantiene nuestro país -1,39 hijos por mujer- y las rupturas matrimoniales, que tan sólo en 2007 ascendieron a 137.451.
Otra de las diferencias destacables con respecto a hace unas décadas es que la mitad de los hogares en los que sólo vive una persona, éstas son menores de 65 años. Sin embargo, parece que una de las consecuencias previsibles de la crisis económica es un nuevo giro: el retorno al hogar de los padres o una continuación de la convivencia de parejas que no ven posibilidades económicas de divorciarse.
Lo más paradójico de este estudio, por otro lado, es el importante aumento de número de hogares en España inversamente proporcional al número de personas que los habitan y los habitarán, no solo por el descenso de natalidad, también por el decrecimiento de la llegada de inmigrantes en un futuro muy próximo.
