Todos acumulamos botellas en casa, unas más grandes, otras más pequeñas, de cristal, de plástico, de colores, con asas… lo cierto, es que todas valen y todas pueden resultarnos útiles en algún momento siempre que sepamos cómo sacarles partido. En este artículo te lo contamos…
1. Para regar el jardín:
Las botellas de refrescos de 2 litros son las ideales para esto. Se pueden obtener resultados tan diferentes como nuestra imaginación nos permita: tumbadas como si fueran jardineras, con la boquilla hacia abajo para colgarlas o cortadas a la mitad para pintarlas y decorarlas a nuestro gusto. Cualquier opción es buena y muy barata. Además, siempre podemos pedir ayuda a nuestros nietos que, a parte de estar entretenidos seguro que se les ocurre alguna nueva creación.
2. Para las plantas:
Con un clavo caliente tenemos que perforar la parte de debajo de una botella de 2 litros. Cuantos más agujeros hagamos mejor. El siguiente paso es quitar el tapón de la botella e introducir una manguera en ese hueco. En cuanto abramos el grifo del agua saldrá como si fuera un aspersor y resultará mucho más sencillo regar más espacios utilizando menos cantidad de agua. También se puede hacer un regadera convencional con una botella que tenga asa, pero en este caso agujerearemos el tapón, así el agua saldrá por ahí y podremos llenar la botella de agua tantas veces como queramos.
3. Como hucha:
Sólo tenemos que hacer una pequeña rendija en la parte superior del tamaño suficiente para que quepan monedas. Después pintaremos la botella a nuestro gusto, incluso podemos pegarle adornos ¡todo lo que se nos ocurra es válido! Además, si queremos coger nuestros ahorros, no tenemos que romperla, basta con abrir el tapón de la botella.
4. Como recipiente:
Para poner las brochas en el baño o los lápices de colores de los niños en su cuarto. Sólo hay que recortar por la mitad una botella pequeña, de las de 330 ml o incluso de las de 250 ml, y poner la parte superior cerca de una superficie caliente (como una plancha) o acercar directamente un mechero, de este modo, quedará perfectamente redondeada y evitaremos que corte o arañe. Después podemos decorarla a nuestro gusto.
Hay millones de utilidades más que se le pueden dar a una botella, casi tantas como nuestra imaginación nos permita… ¿Conoces alguna que quieras compartir con Mayormente.com?
