Los más ricos, guapos, codiciados, buscados o gafes… Todos ‘los más’ han sido recogidos a lo largo de veinticinco años por los ya míticos listados de la revista Forbes. Pero quizá las más conocidas sean las que se elaboran anualmente con las personas más ricas del mundo.
Con motivo de su 25 aniversario, esta publicación a editado el libro Todo el dinero del mundo, en el que se recogen todas las anécdotas de los millonarios aparecido a lo largo de estos años en su listado. En concreto, se habla de cómo amasaron y gastaron sus fortunas las 400 personas más ricas del planeta.
Este compendio, escrito por Peter W. Bernstein y Annalyn Swan con la ayuda de la revista y de un equipo de escritores, recoge curiosas historias como la intención de Bill Gates y Paul Allen, ambos fundadores del imperio Microsoft, de escribir juntos una versión de BASIC para MITS Altair 8800; o la de Warren Buffet que, a pesar de ser el único que rico que ha aparecido los 25 años en la lista, continua viviendo en la casa que compró en 1958 por cerca de cinco millones de las antiguas pesetas.
También se recoge la historia del multimillonario H. Wayne Huizenga, creador de compañías como Waste Management Inc. y Blockbuster Inc., que abandonó la facultad y se hizo célebre por su consejo: ”Nadie se ahogó jamás en su propio sudor”. Otra cita que ha pasado a la historia es la del ex directivo de American Internacional Group Inc., Hank Greenberg, ”todo lo que quiero en la vida es una ventaja injusta”. Y es que en contra de lo que se pueda creer en ocasiones, todas las fortunas requirieron esfuerzo, trabajo, falta de compasión y, por qué no, alguna dosis de suerte.
Uno de los datos más curiosos de la mayoría de millonarios que aparecen el libro es que muchos eran jugadores de póker, eran arriesgados, y como tal jugaron con sus riquezas. Otro hecho destacable es la falta de formación universitaria de los susodichos, así, sólo una de las cinco personas más ricas del pasado han finalizó sus estudios académicos, Warren Buffet.
