La presbicia o vista cansada es la principal anomalía visual que afecta a los mayores de 45 años. Es un problema refractivo que se produce cuando el cristalino (la lente natural del ojo) pierde parte de su capacidad de enfoque debido al paso del tiempo. La presbicia está asociada al envejecimiento de los órganos, y por ella, cosas tan sencillas como enhebrar una aguja o leer letras pequeñas en una revista se convierten en un enorme desafío. Pero también existen otros síntomas como que tengamos los ojos llorosos con más frecuencia e, incluso, que en ocasiones veamos doble y tengamos dolor de cabeza. Pues bien, si notamos alguna de estas molestias es probable que tengamos la vista cansada, por lo que es recomendable hacer estos ejercicios:
- Parpadear a menudo.
- Cerrar los ojos y relájarlos.
- Cerrar completamente los ojos y despegar suavemente el párpado superior, cerrándolo hasta que se pegue nuevamente al ojo (es aconsejable repetir este ejercicio entre 5 y 10 veces)
- Poner sobre los ojos bolsitas de té ya utilizadas también sirven las infusiones de manzanilla o hinojo para aliviar el cansancio , calmar el dolor y bajar la inflamación en caso de que la hubiese.
También te sugerimos lo siguientes consejos básicos:
- Leer con luz natural: ya que la iluminación artificial cansa más los ojos. Intentar evitar los textos escritos con letras demasiado pequeñas.
- Colocar la pantalla del ordenador a la altura de nuestros ojos y evitar los brillos. Esto nos ayudará a tener los ojos más descansados y además a no forzar la espalda ni el cuello.
- Tener la luz encendida mientras vemos la televisión, de este modo haremos menos esfuerzo con los ojos.
- Utilizar gafas de sol con la protección adecuada contra los rayos ultravioletas.
- Evitar tocarse los ojos con las manos sucias ni frotarlos si se siente picor. Lo recomendable en estos casos es lavarlos con abundante agua fría.
- Una buena alimentación: estos cuidados pueden ser más efectivos si se complementan con una dieta rica en vitaminas A, B, C y F (zanahoria, hortalizas, cítricos, vegetales de hoja verde, mariscos, té verde, fruta…), minerales como el zinc y alimentos naturales. Recientes estudios también hablan de las bondades del chocolate en este aspecto. Y, por supuesto, evitar sustancias nocivas como el alcohol o el tabaco.
Un dato alarmante con respecto a la presbicia, es el que se concluye de un reciente estudio que afirma que el uso de ordenadores, tablets y teléfonos móviles está adelantando hasta 10 años la aparición de la vista cansada, que normalmente era un problema a partir de los 50 años.
Parece que la presbicia llega tarde o temprano, nadie escapa de ella. En cualquier caso, lo mejor es acudir al oftalmólogo para que él pueda valorar si hay o no otro problema más grave. O bien si queremos plantearnos la opción de la cirugía y decirle ‘adiós’ para siempre.