Según un estudio de la Fundación ACE-Barcelona Alzheimer Treatment & Research Center, el 30% de las personas enfermas de Alzheimer viven solas y no tienen a nadie que les cuide y más de un 6% todavía conduce.
Para llegar a estas conclusiones se analizó a cerca de 6 mil personas con diferentes tipos de demencia y del análisis se obtiene que una de cada 3 no recibe los cuidados necesarios para su enfermedad ni cuenta con la supervisión de nadie en su vida cotidiana, lo que implica que muchas de sus decisiones ponen en peligro su salud, su vida e, incluso, la vida de otros.
En el caso de los que conducen, se suman los riesgos, puesto que estas personas no tienen la misma capacidad que otras para actuar ante un imprevisto, tampoco su capacidad de coordinar movimientos es igual de rápida, por lo que podrían ocasionar daños a terceros.
Según los investigadores, existe gran desconocimiento con respecto a la enfermedad de Alzheimer y mucha gente confunde el deterioro cognitivo con el proceso natural del envejecimiento unido a la edad y, es por eso, por lo que no actúan tan rápido como debieran o no acuden a un especialista o llevan a la persona afectada cuanto antes.
Es importante informar y concienciar a la sociedad para que si alguien tiene cerca un familiar o una persona con demencia, ésta se pueda tratar desde el principio e intentar frenar la patología en la medida de lo posible.
