Turner y los maestros se ha convertido en una de las exposiciones más visitadas de todos los tiempos, en parte, debido a su carácter itinerante, gracias al que estos días recalará en Madrid, más concretamente en el Museo Nacional del Prado (salas A y B del edificio de Los Jerónimos), donde va a permanecer abierta entre el 22 de junio y el 19 de septiembre de este año.
Turner es uno de los creadores más queridos por el gran público, que se siente muy cercano a su obra al descubrir en ella luz, emoción y mucha vitalidad; sus piezas son capaces de transmitir un sinfín de sentimientos y, aunque no llegan a la abstracción, se acercan mucho a ella; constituyendo un paso previo que ha conseguido acercar al arte contemporáneo incluso a los más escépticos. Sin embargo, este pintor inglés del siglo XVIII no sólo fue un adelantado a su tiempo en esta materia; Turner es uno de los pocos artistas que gozaron de fama y reconocimiento en vida y, además, de forma precoz: fue elegido miembro de la Royal Academy of Arts con tan sólo 22 años y tres años más tarde inauguraba su propia galería.
Esta exposición es, por tanto, una muy buena apuesta del Prado para los meses de verano y más todavía si tenemos en cuenta que la muestra contará con algunas piezas nunca antes mostradas en nuestro país; como Muchacha en la ventana, de Rembrandt, y Les Plaisirs du Bal, de Watteau. Además, Turner y los maestros, presenta algunos cambios en relación a las exposiciones anteriormente mostradas en Londres y París; de este modo, contará con la presencia en exclusiva de algunas grandes obras maestras del inglés: Naufragio de un carguero, Tormenta de nieve: Aníbal y su ejército cruzando los Alpes, Paz – Entierro en el mar, Sombra y oscuridad: la tarde del Diluvio y Luz y color (la teoría de Goethe) – la mañana siguiente al Diluvio – Moisés escribiendo el libro del Génesis.
La relación de Turner con muchos de sus maestros -aquellos genios cuya pintura hizo honda mella en su técnica, su inspiración y su paleta- es tan intensa que, en ocasiones, resulta difícil diferenciarlos, incluso cuando las obras se han realizado con siglos de diferencia. Si quieres prepararte un poco antes de visitar la muestra, te proponemos que abras este juego que han colgado en la web del Prado y que, sin duda, te ayudará a descubrir a fondo la obra del pintor inglés y a hacerte una idea más concisa del propósito de esta exposición.
