Internet es ya la principal fuente de información para una parte importante de la población y el ámbito de la salud no escapa de esta realidad. Según los datos de la encuesta El rol de internet en el proceso de consulta de información sobre salud, del laboratorio farmacéutico Pfizer, un 80% de los internautas busca información sobre este tema como un complemento a la información que proporcionan los médicos y farmacéuticos, y no como sustitución de estos profesionales.
Durante el IV Foro Diálogos: La información al paciente: una cuestión del Siglo XXI, celebrado en Madrid hace unos días y en el que se ha presentado la mencionada encuesta, se ha se ha analizado el impacto de los canales online de información de salud y las nuevas experiencias que se están produciendo en este sentido. Según el Director de la Unidad de Acceso y Relaciones Institucionales de Pfizer, Juan José F. Polledo “En la Red, los usuarios encuentran la información que muchas veces el médico no les facilita o que no han logrado entender en un lenguaje más comprensible, coloquial y ajustado al ciudadano” (el 70% de los pacientes acude a Internet antes o después de ir al médico, y el 82% utiliza la Red para obtener información ampliada y, en menor medida, para entender un tratamiento o enfermedad, siendo mayor el número de mujeres que el de hombres que muestran interés por este tipo de contenido).
Paradójicamente, este elevado consumo de Internet no va acompañado de unos contenidos de confianza y sólo el 43% de los encuestados confía “bastante” en la información obtenida a través de este canal, principalmente en la Wikipedia (63%) y los foros (52%), ya que únicamente un 7% de los internautas teclea directamente una URL que conozca para obtener este tipo de información. Y es que como afirma Juan José F. Polledo “el 96% recurre a un motor de búsqueda cuando quiere satisfacer sus dudas ya que no se reconocen páginas de referencia en este sentido” y “(…) se accede a mucha información y a páginas seguras y recomendables, pero también a otras que no cumplen con los mínimos requisitos exigidos y que pueden llegar a desinformar y confundir”.
Curiosamente, las redes sociales aún no participan demasiado en cuestiones de salud. Estos canales son conocidos para el 70% de los encuestados, pero tan sólo un 12% hace uso para estos temas. De igual forma, los internautas aseguran conocer las páginas de ministerios, asociaciones de médicos, pacientes e industria farmacéutica, pero no recurren a ellas.
El trabajo lo ha realizado la agencia de investigación The Cocktail Analysis, que durante el mes de julio entrevistó a 1.011 internautas de entre 22 y 55 años.
