Si bien el calor viene y va durante estos días, la brillante luz de la primavera puede ser tan peligrosa como en pleno agosto y puede que no tomemos todas las precauciones que se recomiendan para poner a salvo nuestra salud de estas radiaciones. El III estudio de los españoles sobre salud visual de Transitions Optical en 2008 concluye que el 95% de la población española desconoce los riesgos de la exposición de los ojos a la radiación ultravioleta. Por tanto, sólo un 5% sabe lo que puede provocar el sol en este órgano tan sensible.
En la paulatina concienciación de la población sobre los efectos nocivos de la exposición prolongada al sol y sin la protección adecuada, parece que solo hemos avanzado en una dirección. Según este informe, un 64% de la población está sensibilizada con los casos de cáncer de piel producidos por el sol, pero ese porcentaje se reduce considerablemente cuando se trata de los daños oculares.
Otro dato llamativo que se desprende del estudio es que un 10% de los encuestados que usan gafas acuden al especialista cada dos años y algunos nunca han ido al oculista a realizarse una revisión. Por tanto, al igual que se han empleado grandes esfuerzos para concienciar sobre el cuidado de la piel, se hace necesaria la elaboración de campañas informativas y educacionales sobre la importante de cuidar la salud visual.
Entre los consejos de los especialistas, hay que recordar, sobre todo en esta época: que hay que realizarse revisiones oculares, se tengan o no problemas de visión, con cierta frecuencia –menos de dos años-; es aconsejable llevar gafas todo el año, no solamente en primavera y verano; es mejor no llevar gafas que llevarlas malas ya que pueden multiplicar los efectos nocivos; invertir en gafas de calidad, homologadas y con filtros de rayos UV adecuados es hacerlo en salud.
