Como cada año al llegar el buen tiempo y empezar a plantearse la ‘operación bikini’, os advertimos del riesgo al que sometemos a nuestra salud si optamos por atajos en lugar de dietas saludables que combinen una alimentación equilibrada con el ejercicio físico. Precisamente, hace unos días, los expertos reunidos en la I Jornada sobre Dietas y Productos Milagro coincidían en que los regímenes que prometen perder mucho peso en poco tiempo no sólo son un fraude, sino que pueden resultar peligrosos para la salud.
Normalmente, la desesperación por perder peso cuanto antes hace que muchos nos agarremos a un clavo ardiendo, pero la experiencia, si no la Medicina, ha demostrado que en ocasiones el remedio resulta peor que la enfermedad cuando se produce el denominado efecto rebote. Este fenómeno, causado por el desorden alimenticio que implican estas dietas y la ansiedad que genera un brusco cambio en las cantidades que se ingieren, provoca un rápido aumento de peso, incluso del doble de lo perdido, que resulta más difícil aún de eliminar.
Los consejos de los expertos en estos casos es siempre la misma: acudir a un especialista que nos ayude a elaborar una dieta equilibrada según nuestras necesidades nutritivas y siempre combinarla con ejercicio físico.
Para comprender el por qué no se debe confiar en dietas desequilibradas o que excluyen determinados alimentos basta con atender a cinco factores: las elaboran personas que no son profesionales de la nutrición; no detallan cantidades exactas; prometen perder mucho peso en muy poco tiempo; su eficacia no ha sido comprobada científicamente y existen demasiados argumentos médicos en contra.
