Aunque éste mes de mayo está siendo más lluvioso que floral, lo cierto es que todos tenemos ganas de que llegue el buen tiempo, para disfrutar, entre otras cosas, de la belleza de los campos verdes y floridos. Mientras esperamos a ver si el tiempo acompaña para disfrutar de la naturaleza en su plenitud, os proponemos aprender a hacer arreglos florales; un hobby que cada vez está más en boga y cuya práctica está, además, muy ligada a los dictámenes de la moda.
Las últimas tendencias en esta materia se orientan hacia la vertiente más “silvestre” de la floristería. Los arreglos estridentes, con flores llamativas de vibrantes colores y envueltos en celofanes brillantes están de capa caída. Ante todo, se busca un efecto totalmente natural; los ramos se atan con materiales como rafia o cordón y el verde cobra protagonismo, llegando incluso a desplazar a la flor. Flores que, por otra parte, se tornan campestres; consiguiendo que los ramos y los arreglos estén llenos de sencillez y frescura.
En Madrid existen algunos lugares donde se puede aprender a hacer todo tipo de arreglos, mientras se aprenden los rudimentos de la floristería. Uno de los más interesantes es Sally L. Hambleton, donde se ofrecen talleres de decoración, arreglos e incluso ramos de novia, muy en la línea de las últimas tendencias. En Brumalis, la recoleta floristería de Federica & Co., también se organizan talleres periódicamente; igual que en Bornay, en Barcelona, donde el estilo es quizá más acabado, pero sin duda muy novedoso.
