Las prisas, el estrés diario, o, simplemente, la pereza y cansancio para detenerse a elaborar un guiso durante horas, hacen que, en ocasiones, entrar en la cocina sea un suplicio. El microondas no solo ofrece rapidez, también miles de posibilidades culinarias que no tienen nada que envidiarle al resultado de los fogones.
Exceptuando fritos, casi todo lo que imaginemos se puede cocinar en este electrodoméstico que ha pasado de mero calentador de platos a una ayuda indispensable para comer sano, de forma rápida, sin ensuciar y sin necesidad de ‘tirar’ de alimentos precocinados o congelados.
Primer plato. Una salsa casera en seis minutos: bechamel. Verter en un recipiente hondo un cuarto de litro de leche, una cuchara sopera de harina, una pizca de sal, nuez moscada y pimienta y mezclar manualmente. Después los introducimos dos minutos en el microondas a la máxima potencia; lo batimos y volvemos a poner un minuto más. Finalmente, añadimos 25 gramos de mantequilla y la mezclamos con el resto de la salsa.
Para completar el primer plato podríamos preparar unas coliflores: cortándolas en ramitas y colocándolas en un recipiente para microondas con cuatro cucharadas de agua y sal. Dejamos cocerse la coliflor durante 15 minutos a la máxima potencia (700 W) y después sólo hay que mezclarla con la bechamel.
Segundo plato: albóndigas caseras. En primer lugar vez tenemos que preparar la masa de carne con sus condimentos – huevo, pan rallado, ajo, perejil y sal- y darle forma. Por otra parte, cortaremos verduras y tendremos a mano caldo. Calentamos el caldo durante tres minutos e introducimos las verduras –patatas, zanahorias y guisantes-. Una vez calentadas y reblandecido el acompañamiento, ponemos las albóndigas sobre el caldo y la verdura y lo dejamos cocinar en el microondas 15 minutos. ¡Y al plato!
Postre: frutas flambeadas. ¿Por qué renunciar a la exquisitez en nuestra mesa diaria? No nos llevará nada preparar unas deliciosas frutas flambeadas. Se calienta mantequilla, con el azúcar en el microondas en un recipiente grande durante 1,30 minutos a máxima potencia. Después calentamos el brandy 30 segundos, se rocía la fruta con ambas mezclas y se flambea.
Estas recetas no son más que un sencillo ejemplo de que comer bien no tiene por qué suponer horas en la cocina. Ahora te toca a ti proponernos platos…
Más recetas en: www.afuegolento.com/recetas/microondas
Exceptuando fritos, casi todo lo que imaginemos se puede cocinar en este electrodoméstico que ha pasado de mero calentador de platos a una ayuda indispensable para comer sano, de forma rápida, sin ensuciar y sin necesidad de ‘tirar’ de alimentos precocinados o congelados.
Primer plato. Una salsa casera en seis minutos: bechamel. Verter en un recipiente hondo un cuarto de litro de leche, una cuchara sopera de harina, una pizca de sal, nuez moscada y pimienta y mezclar manualmente. Después los introducimos dos minutos en el microondas a la máxima potencia; lo batimos y volvemos a poner un minuto más. Finalmente, añadimos 25 gramos de mantequilla y la mezclamos con el resto de la salsa.
Para completar el primer plato podríamos preparar unas coliflores: cortándolas en ramitas y colocándolas en un recipiente para microondas con cuatro cucharadas de agua y sal. Dejamos cocerse la coliflor durante 15 minutos a la máxima potencia (700 W) y después sólo hay que mezclarla con la bechamel.
Segundo plato: albóndigas caseras. En primer lugar vez tenemos que preparar la masa de carne con sus condimentos – huevo, pan rallado, ajo, perejil y sal- y darle forma. Por otra parte, cortaremos verduras y tendremos a mano caldo. Calentamos el caldo durante tres minutos e introducimos las verduras –patatas, zanahorias y guisantes-. Una vez calentadas y reblandecido el acompañamiento, ponemos las albóndigas sobre el caldo y la verdura y lo dejamos cocinar en el microondas 15 minutos. ¡Y al plato!
Postre: frutas flambeadas. ¿Por qué renunciar a la exquisitez en nuestra mesa diaria? No nos llevará nada preparar unas deliciosas frutas flambeadas. Se calienta mantequilla, con el azúcar en el microondas en un recipiente grande durante 1,30 minutos a máxima potencia. Después calentamos el brandy 30 segundos, se rocía la fruta con ambas mezclas y se flambea.
Estas recetas no son más que un sencillo ejemplo de que comer bien no tiene por qué suponer horas en la cocina. Ahora te toca a ti proponernos platos…
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